En mi trayectoria de
carreras y entrenamientos, he podido charlar y compartir ideas sobre "tipos" de runners que podemos encontrarnos en nuestro día a día.
1- El “comedor
nocturno”
Hay runners que la frase
“desayunar como un rey, comer como un príncipe y cenar como un
mendigo”, la olvidan y durante la cena aprovechan y se ponen
“morados”. Esta distribución de las calorías diarias puede
intervenir en el rendimiento deportivo. Ya que al ir comiendo poco
durante todo el día, lo que haremos es entrenar con las reservas
energéticas vacías o, incluso tengamos que retirarnos de nuestro
entrenamiento antes de lo previsto. Para los runners de mañana, las
consecuencias serán aún mayores, y es que la capacidad de
recuperación dependerá de los alimentos que se ingerirán a lo
largo del día.
2-
El “adicto a las barritas”
A muchos
compañeros les he visto tomar barritas, porque según ellos “sé
qué estoy tomando exactamente”, y empiezan a decirme de memoria
todos los elementos que podemos ver especificados en los envoltorios.
Pero estos complementos pueden traernos inconvenientes, y es que al
pasar por un proceso, pierden fibra y otras sustancias beneficiosas
para nuestra salud. También
se puede estar ingiriendo en exceso alguno de los nutrientes en los
que la mayoría de las barritas vienen reforzadas. Por ejemplo,
muchas contienen el 50% de la cantidad diaria recomendada de zinc.
Ninguna
barrita puede considerarse un alimento completo ni sustituir a
ninguna comida puesto que no contiene el espectro adecuado de
nutrientes.
3-
El
de la “fobia a la grasa”
Y
es que también me he llegado a encontrar con los fóbicos a la
grasa. A pesar de estar demostrado científicamente que la grasa es
necesaria, muchos runners la consideran “persona non grata”.
Pero no saben que las “grasas buenas” bajan el colesterol,
colaboran en el proceso de absorción de vitaminas, ayudan en la
digestión y actúan regulando el metabolismo. Pero sobretodo, la
grasa es importante puesto que nuestro cuerpo empezará a degradar
nuestros niveles de grasa cuando las reservas de carbohidratos se nos
hayan acabado. Esto es sumamente importante para los runners de
resistencia.
No
consumir un mínimo de grasa saludable incrementa el riesgo de lesión
y perjudica tu sistema inmune y tu rendimiento.
4-
El que entrena “de vacío”
Muchos
me han llegado a comentar que salen a entrenar sin haberse alimentado
de manera correcta. A pesar de yo haber leído que hay estudios que
demuestran que un tentempié antes de entrenar mejora los niveles de
energía y el rendimiento. Muchos me han llegado a decir que entrenan
mejor con el estómago vacío, otros, que no soportan el tener que
madrugar a ciertas horas para que les dé tiempo a digerir el
desayuno antes de entrenar o competir. Pero
no necesitas comer mucho para beneficiarte de un aporte de energía.
Una
rebanada de pan, una pieza de fruta o un yogur te ayudarán a
entrenar más duro y mejorar antes.
5- Los obsesionados de
las proteínas
Los runners
necesitamos más proteínas que las personas sedentarias,
puesto que las proteínas las necesitamos para la construcción y
recuperación de los músculos intervinientes en el entrenamiento o
competición. No entienden que con una cantidad adecuada de
proteínas, nuestro cuerpo ya puede iniciar el proceso de
construcción y recuperación muscular. Y es que un consumo elevado
puede perjudicar el hígado y los riñones.
Trata de que tu consumo diario de proteínas suponga entre el 10 y el 15 por ciento de las calorías que consumes habitualmente.
6-
El
que abusa de los suplementos nutricionales
A
estos les pasa lo mismo que a los obsesionados de las proteínas:
están 100% convencidos de que si algo es bueno, el exceso no es
malo. Pero,
tanto las vitaminas como las sales minerales, son únicamente
efectivos en dosis correctas y únicamente cuando existe una
deficiencia.
Y es que no es raro un exceso de consumo de suplementos que en
grandes cantidades acarrea problemas de salud.
Recuerda por qué se llaman suplementos: vienen a suplementar a una dieta saludable, no pueden sustituir a los alimentos completos.